La conducción defensiva, en esencia, significa conducir de una manera que utilice estrategias de conducción segura para permitir a los conductores afrontar los riesgos identificados anticipándolos.
Estas estrategias van más allá de las instrucciones, leyes y procedimientos básicos de tránsito.
A través de la conducción defensiva, un conductor puede mejorar sus habilidades de conducción y reducir los riesgos de conducción anticipando situaciones y tomando decisiones claras y seguras. Estas decisiones se toman en función de las condiciones ambientales y de la carretera actuales al realizar maniobras de conducción segura.
Beneficios de la conducción defensiva
Los beneficios más destacados de la conducción defensiva son mejorar las condiciones de conducción segura y proteger al conductor, a otros vehículos e incluso a los peatones de accidentes de tráfico en un alto porcentaje.
La conducción defensiva aumenta el nivel de atención y concentración del conductor y es la primera línea de defensa psicológica y mental del conductor.
Quizás se sorprenda cuando le digamos que la conducción defensiva puede reducir significativamente los errores de conducción, especialmente porque ayuda al conductor a controlar cualquier error cometido por otros al conducir y así anticiparse a ellos para evitar accidentes.
¿Cómo se practica este tipo de liderazgo?
- Respete los semáforos y los semáforos de control de tráfico en las carreteras.
- Observe el campo de prácticas de su carril y las líneas de separación.
- Cuidado con conducir sin llevar puesto el cinturón de seguridad en todo momento.
- Revisa tus luces y señales de todos lados antes de subir al auto, si decides salir de noche es necesario que los demás te vean.
También es necesario que puedas ver la carretera con mayor claridad durante la oscuridad de la noche
Asegúrese de utilizar las señales laterales antes de girar o moverse hacia un lado de la carretera.
- La distancia entre los coches es muy importante para una conducción segura, deja un espacio relativamente amplio entre tú y los coches que van delante de ti para que, si te detienes, tengas suficiente espacio para frenar sin que se produzca ninguna colisión.
- Evite acelerar y evitar seguir el ritmo de otros automóviles que circulan a alta velocidad, así como realizar maniobras rápidas entre ellos, porque esta se considera una de las causas más destacadas de accidentes.
Además, evite conducir muy despacio, porque conducir lento no es menos peligroso que conducir rápido, especialmente porque obstruye el tráfico detrás de usted y abre un mayor margen para una colisión por detrás. Sorprendido por tu baja velocidad, que en muchos casos provoca una colisión, sólo tienes que respetar los límites de velocidad aplicables y nada más.
- Evite conducir si está cansado y tiene poca concentración.
- Tus ojos son tu ventana para conocer y apreciar el mundo que te rodea, y son tu primera fuente de información en la carretera mientras conduces, así que úsalos regularmente y muévelos constantemente entre todos los espejos del auto. Explorar con la vista todos los lados de la carretera, especialmente el frente, para detectar a tiempo cualquier peligro, esto se hace apartando la vista del automóvil y no centrando la mirada en el frente del mismo.
- Evite todo lo que pueda distraer su atención mientras conduce, como usar el teléfono, comer y otras cosas que distraigan su mente y le impidan concentrarse.
- Tenga siempre en cuenta que todos en la calle y en el tráfico pueden cometer errores y ponerlo a usted y a ellos mismos en una situación embarazosa o peligrosa.